Murray’s Cheese Bar, Vinos y Quesos en Pleno Village de Nueva York

Murray’s Cheese Bar es la tentación para los amantes del queso. Desde los años 40, este pequeño local, lleva ofreciendo los mejores quesos del Village de Nueva York

Hay muchas cosas que me encantan de Nueva York al igual que me gusta escribir sobre viajes y comida. Entre mis preferidas está la de probar restaurantes nuevos. Cuando mi amiga me preguntó: “¿dónde podemos ir para que luego puedas escribir un post en tu blog?”, pensé que era la pregunta perfecta. Estando en la esquina de Bleecker Street con la Sexta Avenida se nos hizo la hora de almorzar. No teníamos prisa, así que anduvimos por la calle Bleecker y tardamos unos dos segundos en tomar una decisión: Murray’s Cheese Bar!

Yo me considero una “foodie” nivel amateur y si eres habitual en El Boquerón Viajero, ya sabrás que soy una aficionada al vino y el queso. De hecho cuando era pequeña y visitábamos a mis abuelos en Hartford Connecticut, lo primero que siempre sacaba mi abuela de la cocina no era una galleta recién horneada, sino el queso especial que me gustaba del mercado local. Así que la idea de un bar de quesos es posiblemente el mejor invento gastronómico bajo mi punto de vista.

Comedor de Murray's Cheese Bar

Murray’s fue fundado en los años 40 por Murray Greenberg quien fue, curiosamente, un veterano de la Guerra civil española. Empezó esta pequeña tienda de quesos y lácteos en Greenwich Village para la gente italo-americana que había por entonces en el barrio. No fue hasta los años 90 cuando Rob Kaufelt convertiría Murray’s en un lugar con encanto único para cualquier amante de los quesos. En Murray’s se puede encontrar casi cualquier tipo de queso, además de embutidos y productos especiales. Murray’s incluso tiene sus propias cuevas para curar el queso bajo la calle Bleecker y además da clases para los que quieran saber más sobre el queso.

Mi experiencia con Murray’s se ha limitado hasta ahora a probar los deliciosos quesos y a entrar en la tienda de vez en cuando para salivar con las comidas especiales que tienen, mientras intento elegir algo original para llevar a una fiesta o una cena con los amigos. Había pasado por el Cheese Bar varias veces, pero nunca había tenido la oportunidad de entrar, y os puedo decir que ¡estaba igual de rico a como me imaginaba!

Quesos de Murray's Cheese Bar

Al entrar en Murray’s Cheese Bar se nota que está decorado de esa forma perfecta y limpia pero a la vez rústica, que esperas de un sitio conocido por sus vinos y sus quesos. El suelo está hecho de madera desgastada, las mesas pintadas de blanco y las sillas de un rojo alegre; llegando hasta el final del estrecho restaurante. En las paredes hay colgadas fotos en blanco y negro, incluyendo una de una cabra con mucha personalidad. Los camareros estuvieron atentos y amables y pedimos un vaso de vino blanco antes de mirar la carta. ¡Iba a ser una decisión difícil! Al final decidimos compartir una tostada de queso ricotta ahumado y un sandwich “masterpiece” con queso de cabra, alcachofas a la plancha, tomates al horno, calabacín, remolacha y alioli de aceitunas negras en pan de ciabatta.

Sandwich de queso de cabra en Murray's Cheese Bar

El primer plato en llegar fue la tostada de queso ricotta. El emplatado era sencillo con tres rebanadas de pan tostado y un bol felizmente lleno de queso ricotta con miel y pistachos encima, para darle un toque crujiente. La ricotta estaba cremosa y deliciosa y la miel le daba justo el toque necesario de dulzura. Mi amiga vio un único fallo, me dijo en una voz muy seria que íbamos a necesitar más pan. Tenía razón, pero la camarera nos trajo unas trozos más en cuanto notó que no estaba equilibrada la cantidad de queso a la ración de pan.

Tostada de Queso ricota en Murray's Cheese Bar

Cuando acabamos la tosta de ricotta llegó el sandwich. Elegimos compartir un sandwich, ya que son bastante grandes y el chef nos lo partió en dos mitades y nos dió a las dos unas patatas fritas para acompañar al plato. Era uno de esos sandwiches que recuerdas días después por lo rico que estaba. De hecho, ahora mismo, mientras tecleo esto, estoy recordando lo delicioso que estaba el queso de cabra y la mezcla perfecta de sabores. No sé si puedo decir cuál de los ingredientes llevó a este sandwich al siguiente nivel. No sé si fue la remolacha o las alcachofas, pero en cada bocado del sandwich había un sabor sofisticado, salado, pero lo justo y siempre balanceado con el pan de ciabatta. ¡Éste es el estilo de comida que podría comer cada día!

Debería mencionar que Murray’s Cheese Bar también ofrece brunch y cena, y que incluso puede satisfacer tu necesidad de queso en un momento entre horas. Su ubicación en el Village es perfecta ya que es fácil de encontrar si has quedado con alguien y tiene es fan del queso. Ruskomiendo Murray’s Cheese Bar con un Boquerón de Oro por el servicio, el ambiente relajado y, claro está, la riquísima comida y los vinos. Murray’s lleva años formando parte del barrio y la historia del Village, así que sabemos que no te arrepentirás de parar en el Cheese Bar. De hecho, si sois como yo, ya estaréis pensando en qué pedir cuando vayáis.

Interior de Murray's Cheese Bar

Información sobre Murray’s Cheese Bar

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