Un viaje especial con múltiples opciones para aprovechar vuestros últimos momentos solos y recargar pilas ante la inminente llegada de vuestro bebé.
En los últimos años se ha puesto de moda la idea del babymoon. Es un viaje para disfrutar en pareja durante el embarazo y antes de que nazca el nuevo bebé. Por supuesto hay muchas formas de hacer un babymoon y siempre siguiendo los consejos de vuestro ginecólogo o médico. Si tienes que viajar en avión te va a recomendar que sea antes del tercer trimestre, y la verdad es que nosotros también lo recomendamos así, ya que tendrás más energía y podrás explorar más con tu pareja.
Nosotros viajamos a Nueva York durante mi segundo trimestre de embarazo, y también ayudamos a otra pareja que quería hacer lo mismo en navidades. Por eso queríamos compartir con vosotros por qué pensamos que Nueva York es un destino perfecto para tu babymoon.
Antes de viajar
Antes de reservar los billetes de avión, preguntamos a la matrona y al ginecólogo. Ambos nos dijeron que no habría problema ninguno con el vuelo de 6 o 7 horas. Lo único especial era que tenía que levantarme cada hora para dar un paseo y estar atenta por si me dolían las piernas en los días siguientes al vuelo, porque podría ser un trombo. En fin, los mismos consejos que dan a la gente siempre, pero con algo más de cuidado.
También era importante traer los documentos del embarazo, o sea, la historia médica, las vitaminas o medicamentos que estaba tomando, y beber mucha agua. Otra cosa que sonaba bastante sencillo de hacer, así que reservamos el vuelo sin miedo para volver justo antes de nuestra cita médica de la semana 20. Volveríamos de la Gran Manzana y nos enteraríamos del sexo del bebé. Nos parecía un gran trato.
La maleta
Tampoco fue tan complicado hacer la maleta para nuestro babymoon en Nueva York. Lo único era recordar ponerte muchas capas por si acaso hacía calor dentro de los sitios. También era importante traer zapatillas muy cómodas para poder patear la ciudad. En el aeropuerto compramos algo de comida y unas botellas de agua antes de montarnos en el avión, por si acaso necesitaba tomar algo además de lo que nos iban a dar las azafatas.
El alojamiento
Aquí mi consejo es pagar un poquito más por un traslado privado desde el aeropuerto y para estar cómodo con un hotel cerca de Times Square. Normalmente estoy más a favor de buscar el hotel según tus propios gustos y no por cercanía a Times Square, pero en un babymoon lo último que quieres es un trayecto más largo en metro al final del día. Es un momento para gastar ese dinero en tu confort y sin remordimientos.
Recomiendo el Archer Hotel porque las habitaciones son un poco más pequeñas (lo cual no te valdrá dentro de poco con el cochecito y todo lo que conlleva viajar con niños) y su estilo boutique, donde cuidan hasta el último detalle. Por ejemplo, al llegar nos regalaron una toalla con capucha especial para el bebé con una notita dándonos la enhorabuena. Además tienen vistas del Empire State, un rooftop para tomar una copa (sin alcohol para mí) y un restaurante tipo steak house con opciones para matar el hambre de cualquier embarazada.
La ciudad y por qué es el destino perfecto
Nueva York tiene de todo, así que es fácil encontrar cualquier cosa que a lo mejor has olvidado en la maleta. Además, como es una gran ciudad, siempre estás cerca de un médico o un hospital si hace falta (eso sí, hay que asegurarse de comprar un seguro médico de viaje por si acaso, aunque siempre aconsejamos esto, embarazada o no.) En cuanto a las actividades para vuestro babymoon, hay que pensar en el nivel de energía que tendrás en ese punto del embarazo. Es cierto que en el segundo trimestre estás mucho mejor que en el primero, cuando solo quería dormir siesta tras siesta. Pero también empiezas a notar que no puedes estar de pie tantísimo tiempo, y a lo mejor necesitas buscar un baño con algo más de urgencia.
En nuestro caso las vacaciones suelen tener mucho que ver con los sitios culturales y la gastronomía, así que el truco fue buscar restaurantes que tenían opciones deliciosas que podía tomar a pesar de las comidas “prohibidas” del embarazo. En Nueva York no fue muy difícil, ya que hay tantas personas que piden una preparación diferente o especial, sin un ingrediente o con pan sin gluten, que nadie pensaba dos veces si quería modificar algún plato. Para las actividades y sitios que visitamos siempre miraba si había alguna cafetería molona cerca, o dónde había un Starbucks para usar el baño corriendo si hacía falta.
Nuestros días eran más relajados empezando un poco más tarde, un desayuno en un café cerca del hotel, y luego una visita a algún sitio de interés. La comida en un restaurante donde podíamos sentarnos y charlar tranquilamente para recargar las pilas. Por las tardes o dábamos un paseo mirando tiendas o visitamos un museo antes de descansar y ducharnos para la cena. Quizás no vimos tantas cosas como de costumbre en el viaje, pero disfrutamos más de lo que sí vimos, y no sentí que estaba “perdiéndome” nada. Al fin y al cabo la meta de un babymoon es disfrutar con tu pareja.
Sitios que no pueden faltar en un babymoon en Nueva York
Recomiendo, sin lugar a dudas, un par de experiencias en Nueva York para un viaje de este tipo. El primero es un crucero que te lleva alrededor de la isla de Manhattan con vistas de la Estatua de Libertad, el Puente de Brooklyn y los rascacielos del bajo Manhattan. Es impresionante, vas sentada y sobretodo es muy romántico. No sé vuestro caso, pero mi ginecólogo me dejó tomar un vaso de vino de vez en cuando y lo aproveché en ese momento.
Otra experiencia que recomiendo es un paseo por los Jardines Botánicos de Brooklyn o del Bronx. Ambos jardines son preciosos (quizás no tanto en el invierno, pero el resto del año sí) y tienen bancos para descansar, además de muchos lugares perfectos para sacar fotos y robarle un beso a tu pareja.
Los museos. En Nueva York hay un museo para casi cualquier gusto (o si no te gustan los museos, hay visitas guiadas de muchos lugares como el Estadio de los Yankees o Madison Square Garden). Aprovecha que estos sitios tienen muchos bancos para sentarse, casi siempre hay una cafetería para tomar algo y por supuesto tienen baños para los momentos “emergencia”.
Una cena con vistas. No tienes que gastar mucho dinero. Una cena con vistas puede ser una pizza de Juliana’s o Grimaldi’s en el parque del Puente de Brooklyn disfrutando del skyline de Manhattan. También existen opciones más caras, así que depende de tu bolsillo y de lo que quieres para tu cena romántica. Es una cuestión de parejas, pero Pedro y yo elegimos un sitio asiático en Long Island City, Queens con vistas de Manhattan que se llama Penthouse 808.
Un paseo por Central Park. A lo mejor no es el momento de bicicletas, pero un paseo por el parque es una oportunidad para sacar fotos, reconectar con tu pareja y quizás disfrutar de una merienda tipo
picnic. Todo eso depende un poco de la época del año.
Ir a espectáculo de Broadway o algún tipo de concierto. Nosotros fuimos a la ópera con unos amigos y lo pasamos genial vistiéndonos bien y disfrutando del ambiente elegante del Metropolitan Opera en Lincoln Center. También podría ser el momento de ir a un club de jazz y disfrutar de uno de los mejores músicos del momento improvisando con el saxo o la trompeta hasta la madrugada. Eso con el bebé lo veo más difícil, así que es el momento perfecto para aprovechar.
Un tour guiado en español. Como a lo mejor no vas a querer patear la ciudad como antes del embarazo, una solución para ver la ciudad sin tener que caminar tanto es reservar un tour en vehículo. Sí, bajarás para sacar fotos y visitar los sitios importantes, pero no es lo mismo que ir de punto a punto en metro con las escaleras y la gente.
Una última palabra
En cuanto a un embarazo y un babymoon cada mujer es diferente. He hablado con amigas que han pasado momentos mucho más complicados durante su embarazo mientras que mi caso fue lo contrario a pesar de tener casi 36 años. No hay una forma correcta de tener un babymoon, pero lo que sí me parece correcto es no dejar que Nueva York sea un destino que conoces por primera vez con cochecito, buscando un lugar para cambiar los pañales y con la preocupación constante de la seguridad del pequeño. Siempre hay razones para volver, pero ¿qué mejor destino para estos últimos meses antes de convertiros en padres?
Imagínatelo…
9 comentarios en «Babymoon en Nueva York: Una atractiva escapada para vivir con tu pareja»
Muchísimas gracias por toda la info!! Hacéis un trabajo increíble con este blog!
¡Mil gracias por el comentario, nos alegra mucho que os sea de ayuda! Si necesitáis contratar cualquier cosa para vuestro viaje, aquí estamos 🙂
Muchísimas gracias por toda esta información. Soy de Málaga y teníamos un viaje ya pagado a NY desde Febrero, pero se nos ha colado un polizón jejeje así que en la fecha que iremos (encendido de árbol Rockefeller), por una semana, estaré de unas 18-19 semanas, por lo que genial al ser el segundo trimestre y vuelvo para la ecografía de las 20 semanas. Por ahora me siento genial, llevo un embarazo muy tranquilito, y sería ya mi tercera vez en la gran manzana, pero la primera de mi chico, por lo que nos lo tomamos, no como nuestro último viaje solos, si no nuestro primer viaje los 3 🙂
Espero que todo salga tan bien como a vosotros y podamos disfrutar de los decorados navideños!
¡Hola Miriam!
¡Seguro que os salga genial el viaje! ¡¡¡Enhorabuena por el embarazo y disfrutad mucho los 3!!!!
un saludo,
Abby
Hola!! me voy a Nueva York y estoy embarazada de 12 semanas ya he hablado con los médicos y no hay problema. Sin embargo quería preguntarte el tema de los escáners de cuerpo entero en el aeropuerto. Tuviste que pasar por ellos? Muchísimas gracias!
Hola Beatriz,
Creo recordar que pasé los escáners sin problema. Si estás preocupada puedes avisar a los de seguridad antes de pasar el control.
un saludo,
Abby
¡Hola! Me ha encantado tu post. ¿Cuántos días estuvisteis?
¡Muchas gracias! En esta ocasión estuvimos una semana en Nueva York (6 noches).
Hola! El mes que viene hacemos este viaje estaremos de 23 semanas! Os hicieron vacunar o alguna recomendación acerca del mosquito Zika? También estoy preocupada por el tema comidas.. bebisteis agua que no fuera embotellada?
Gracias por compartir la info !