Si quieres degustar cocina cantonesa auténtica, Nom Wah Tea Parlor es el sitio. Con su ambiente auténtico que se ha mantenido casi intacto, este restaurante lleva un siglo en el corazón de Chinatown.
La calle Doyers de Chinatown es famosa por su pasado peligroso. Al principio del siglo XX había dos pandillas chinas, los Hip Sings y los On Leongs, que se pelearon en Chinatown. El conflicto duró cuatro años y como la calle Doyers es una de las pocas en Manhattan con un ángulo de 90 grados, se convirtió en plena zona de combate ganándose el apodo del “ángulo sangriento.” Hoy en día es una calle típica de Chinatown que sale en muchas películas y anuncios por sus escaparates y su falta de tráfico de coches. De hecho, el día que fuimos a cenar estaban grabando un anuncio para la tele, la calle estaba adornada con farolillos y había actores bailando con la cabeza de un dragón. Es aquí, en esta pequeña callejuela, donde se puede encontrar el Nom Wah Tea Parlor, que abrió sus puertas hace casi 100 años, en 1920.
No vas al Nom Wah Tea Parlor porque es muy bonito o porque tiene un servicio excepcional, sino porque es una experiencia totalmente auténtica. La decoración parece no haberse cambiado desde los años cincuenta, con su suelo de azulejos blancos y negros, mesas tipo cabina y más propio de un diner americano. Las mesas están muy cerca unas de otras y los camareros te dejan una hoja en tu mesa en vez de una carta. De hecho, la hoja es la carta, porque vas marcando los platos que quieres pedir como si fuera un restaurante 100 Montaditos. Por un lado, ese formato te ayuda si es tu primera vez pidiendo Dim Sum ya que sólo tienes que marcar con una X lo que te gustaría probar, y puedes ir pidiendo poco a poco según el hambre que tengas.
A nosotros nos gustan mucho las empanadillas chinas, los dumplings, así que pedimos las de gambas y nos sorprendió comprobar que tenían trozos grandes de gamba en vez de una pasta o gamba machacada dentro de la pasta fina. También recomendamos los fideos fritos. Para los fideos mi madre se sorprendió vernos comiendo con los palillos y llamó al camarero para que le trajera un tenedor. Por supuesto no había problema ninguno, así que puedes elegir el tipo de utensilio que más te guste.
Otro plato que no puede faltar es el famoso egg roll. Es una especie de rollito de primavera pero a lo grande y viene con huevo revuelto entre la capa de masa frita y verduras mezcladas con carne de cerdo picada. No es para nada comida saludable, pero lo disfrutamos mucho para compartir entre dos personas, ya que la masa sale crujiente y los sabores del relleno se mezclan perfectamente. También son famosos por sus bollos rellenos de carne de cerdo, aunque no tuvimos tanta hambre como para probar de todo. Para beber se puede elegir entre refrescos, cervezas chinas y locales o té e infusiones.
Nosotros fuimos a cenar entre semana y no tuvimos que esperar mucho, pero si vas en un día festivo recomendamos ir con más paciencia ya que sigue siendo una empresa familiar y también hacen pedidos a domicilio. El mejor consejo que te podemos dar es ir en un grupo para poder probar varios platos al estilo de las raciones en España.
Siempre nos preguntan si se puede reservar en los restaurantes. En este caso se puede reservar mesa para grupos más grandes, y los fines de semana solo toman reservas para grupos de más de diez personas, además de tener que pedir el menú fijo. En general el Nom Wah Tea Parlor es uno de mis sitios preferidos de Chinatown, porque lo que le falta en belleza lo gana con su historia y el hecho de que sigue siendo un negocio familiar. Se han empeñado en mantener todo lo más auténtico posible desde el primer día y por eso, según dicen, no han hecho reformas para modernizar la apariencia. Su método parece funcionar porque han abierto otros locales en Nolita (Manhattan), el mercado de Canal Street y el Lower East Side, además de un restaurante en Filadelfia.
Nosotros preferimos el local original en Doyers Street por su historia y decoración, ya que los demás sitios son como más modernos. Muy recomendable para parejas, familias con ganas de probar algo diferente (te podemos jurar que a los niños les va a gustar el arroz o los fideos fritos y las empanadillas). También si lo que buscas es cenar a un precio asequible porque eso sí, ningún plato supera los $15 (y la mayoría son menos de $5). ¡Ahora lo único que falta es rellenar tu “carta” y compartir la experiencia con los tuyos!